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Cuando alguien se da de alta por primera vez en Twitter y no ha subido una foto a su perfil, Twitter le otorga por defecto la imagen de un huevo. La variedad cromática del color de fondo es amplia: azul, verde, amarillo, naranja, rojo… Pero el paralelismo con la realidad es el mismo: uno no rompe el cascarón hasta que está listo para ver el mundo.
Más del 60% de los perfiles de Linkedin no incluye extracto; un breve párrafo explicativo que aglutina la esencia de nuestro perfil profesional. En su defecto, muchos optan por mostrar directamente su experiencia profesional perdiendo, así, una gran oportunidad para captar la atención desde el principio.
En Linkedin no sólo hay que estar, hay que destacar. ¿El motivo? Porque esta red social es clave para configurar y potenciar tu marca personal.
Aquí no basta con plasmar tu formación académica y tu experiencia profesional. Hay que ir más allá. ¿Por qué? Ya lo decía Erasmo de Rotterdam: “el talento oculto no produce reputación”. Y tú, ¿quieres sacar a relucir tu talento?
Lo mejor de escribir un blog es, sin duda alguna, el feedback que recibes de las personas. Esta mañana, sin ir más lejos, he recibido un tweet de @Shibami_: mi blog “Curiosidades de Social Media” ha recibido la nominación del One Lovely Blog Award. Se trata de un premio virtual concedido entre bloggers a los que les gusta tu bitácora. El objetivo es el de potenciar la visibilidad de aquellos blogs que, humildemente, pretenden hacerse un hueco en la red.
Aprender sobre la marcha es una dinámica intrínseca al ser humano. Práctica y dedicación son condiciones indisolubles para avanzar en cualquier ámbito. Lo mismo sucede con los blogs. Hasta que no creas el tuyo propio y experimentas cada una de sus funcionalidades, no sabes cuánto partido puedes sacarle a cada una de ellas.
¿Puede Twitter influir en el desarrollo de una noticia? ¿Es una herramienta clave para hacer Periodismo? ¿Influye en el modo de consumir la información? Tres preguntas y una única respuesta: SÍ. El periodista Jon Henley, del diario The Guardian, así lo confirmó en el 3r Congreso Mundial de Periodismo y Educación, celebrado en Bélgica del 3 al 5 de julio.
Dicen que una imagen vale más que mil palabras. Y en una era visual como en la que nos encontramos inmersos, mucho más. El poder emocional que desprenden las fotografías es innegable porque nos hacen partícipes de sentimientos, acontecimientos, sensaciones, etc. En este cúmulo de sobre-exposición gráfica, lo retro y lo vintage triunfa. Esa es, precisamente, una de las claves del éxito de Instagram.
La percepción psicológica que se desprende de tu foto de perfil en redes sociales es determinante para tu marca personal.
En muchos casos, es la primera imagen que una persona puede tener de ti (incluidos los reclutadores de RRHH). De ahí la importancia de escoger una imagen positiva que defina a tu persona.
